Grupo TGT necesitaba una marca con la que hacer competitivos sus postres de queso. Aunque las credenciales en lácteos están más que contrastadas en una marca como la suya, era estratégico insertarse en los lineales de los postres de forma clara y sin ningún tipo de dudas para los consumidores.
Postres
para re-
petir
PUNTO DE PARTIDA

SOLUCIÓN
Buscamos mencionar de manera muy clara la palabra «postre» con un giro que convirtiera la marca en memorable y permitiera crecer el día de mañana hacia especialidades sin queso o no basadas en lácteos.
Usar el prefijo re- para connectar con el indulgence y con esa tendencia a repetir... en los postres.
Un juego de palabras aprovechando una oportunidad clara de memorabilidad: combinar las palabras "repostería" y "postre".
Una terminación en -ia, como una tienda, un colmado del dulce.

Con un artículo generamos sensación de unicidad y tradición
La S que sutilmente insertada en la palabra «repostería» le añade un nuevo significado totalmente perceptible.
Manteniendo la terminación -«ía» se genera sensación de gama, de variedad y de conocimiento, casi como de comercio especialista.
Datos del proyecto
Fecha del proyecto
2019
Tareas
Naming
Cliente
Grupo TGT
Agencia
Morillas